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Editorial del Programa ECOS del día 13 de Abril de 2013
Terremotos y fracking
Para abrir este programa quería volver a hablar del famoso Fracking, esa técnica rechazada en tantos sitios, con estas dos informaciones:
Un estudio relaciona un sismo de 5,7 en Oklahoma (Estados Unidos) con la inyección de aguas residuales, una de las técnicas que usa el polémico método del ‘fracking’
Es sabido que la actividad humana tiene consecuencias en el subsuelo, pero pocas tan espectaculares como un terremoto. Un estudio publicado en la revista Geology ha relacionado un sismo de magnitud 5,7 ocurrido en Oklahoma (Estados Unidos) en 2011, que dejó dos heridos, 14 casas destruidas y carreteras dañadas, con una técnica que se usa en la explotación de hidrocarburos y que consiste en inyectar en el subsuelo el agua residual del proceso. En este caso, el fluido procedía de un pozo de petróleo, pero si el estudio ha tenido impacto en medios internacionales como la BBC ha sido porque la técnica se usa también para eliminar el agua sobrante del fracking, el polémico método de extracción de gas pizarra que algunos países europeos ya han vetado y cuyos riesgos medioambientales están en discusión en otros.
Tras 18 años inyectando sin incidentes los fluidos sobrantes de la extracción de petróleo en un yacimiento agotado, el 5 de noviembre de 2011 los movimientos sísmicos empezaron a asustar a los habitantes de la zona, acostumbrados hasta entonces solo a los tornados. Al día siguiente se produjo el terremoto de magnitud 5,7.
La otra noticia es que Navarra gana el primer ‘round’ al Fracking:
La presión de la ciudadanía y las organizaciones sociales navarras, junto con el voluntariado de Greenpeace Navarra/Nafarroa, consiguen que el Parlamento de Navarra solicite declararla "territorio libre de fracking".
Entretanto, aquí, en casa, coqueteamos y firmamos contratos para explotar el gas de esquisto en la Patagonia, en la cordillera, y peor, en zonas en las cuales existe el mayor acuífero de la región, como Entre Ríos.
Recomiendo bajar de la web la película Promised Land, producida por Matt Damon, o el documental Gas Land. Y después me cuenta.
