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Editorial del Programa ECOS del día 1 de Agosto de 2015

 

Zonas libres de transgénicos en Europa

 

 

Ya no se trata de pataleos de ecologistas fanáticos: La declaración de “zonas libres de transgénicos” ha sido incluida en programas y propuestas de agrupaciones políticas en las pasadas elecciones autonómicas y municipales europeas, pretendiendo proteger a las poblaciones locales.
Tanto como aquí, aunque menos, hay ausencia de epidemiología, exámenes de toxicidad a largo plazo ante las amenazas ya comprobadas que supone la existencia de transgénicos para el ambiente y la agricultura.
Ya hay más de 170 regiones europeas que han decidido prohibir su cultivo a campo abierto simplemente como medida de precaución, y en territorios de variedad de ideologías, desde tres provincias de Finlandia a nueve estados de Alemania, 21 regiones de Croacia y 60 áreas del Reino Unido.
Hoy, en la Unión Europea sólo está permitido el cultivo de un tipo de maíz transgénico (España es su mayor productor).
Ecologistas en Acción, la coalición señera en el viejo mundo en denuncia y protección ambiental, publicó un cuadernillo especial para explicar el tema.
En España, quizás nuestro referente más próximo o más observado, ya son cuatro las comunidades autónomas (Asturias, País Vasco, Baleares y Canarias) declaradas libres de transgénicos.
En la Unión Europea son varios los países, como Austria, Francia y Bulgaria, que han prohibido el cultivo de un maíz transgénico, pese a que la Unión deja librado a que cada país acepte o no.
En Alemania se ha impuesto un etiquetado especial para productos de animales alimentados con alimentos libres de OMG y en Finlandia hay restricciones específicas para los comedores públicos.
Tal como siempre señalo aquí, un cuarto de siglo después de que aparezcan los transgénicos en el mercado, ninguna de sus promesas doradas se han cumplido: ni producen más, ni usan menos tóxicos, ni mejoraron la calidad de los alimentos ni resolvieron el hambre en el mundo.
Pero sí se ha comprobado que luego de liberarlos no es posible controlar su cruza y su propagación, provocando daños impredecibles e irreversibles, ya que es como la metáfora de la almohada de plumas al viento: un organismo liberado en la naturaleza no puede retirarse más.
Vaya a www.ecologistasenaccion.org y échele un ojo al cuadernillo. Esta muy bueno.

 

(Hacé clic en la imagen para ampliarlo)