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Editorial del Programa ECOS del día 29 de Abril de 2017

 

Mejora el ozono!

 

 

Hace muchos años, un día, empezaron a darse cuenta de que los rayos del sol venían más quemones.
Ardían, los dermatólogos detectaban enrojecimientos, aumentaban las queratosis y los cánceres de piel.
Hoy le digo ozono y sabe de qué le hablo.
Entonces, era meramente un nombre del cual se ocupaba la química.
Cuando se empezó a decir que el agujero de ozono estaba adelgazado en épocas de primavera y que dejaba pasar más los rayos ultravioletas, la gente no le dio demasiada importancia. Si hasta muchos tenían en sus casas lámparas UV para tostarse antes del verano! O les regalaban a sus hijas quinceañeras la sesión de cama solar para lucir bronceada en la fiesta de quince!
En 1985, el servicio antártico británico publicó el estudio que mostraba una disminución alarmante de la capa en la región polar. Se había formado el agujero de la capa de ozono.
Hubo mucho que hacer en ese sentido. Porque la ignorancia era enorme, y el riesgo, igualmente alto.
Cuando se decidió internacionalmente armar un protocolo para que cada país establezca sus medidas para dejar de emitir las sustancias cloradas que en la atmósfera rompían las moléculas de ozono, pensábamos que ya era demasiado tarde.
Fue negociado en 1987 y entró en vigencia el 1 de enero de 1989.
La primera reunión de las partes se hizo en Helsinki ese mismo año.
Desde ese momento, el tratado fue considerado como un ejemplo excepcional de cooperación internacional, porque de veras cada país armó sus leyes protectivas, sus planes de sustitución, las industrias hicieron caso y cambiaron sus gases por otros no destructivos.
Y debo decirles que todos miramos con bastante desconfianza porque cuando se trata de gobiernos e industria, suele haber múltiples grises y matices que arreglan las cosas para que nadie pierda. O si, más bien para que pierda el ambiente.
Se ve que esta vez se dieron cuenta que aun estando en las Bahamas o en la Isla Margarita, o en Miami o en Cancún, tomando sol con la familia, estaban en problemas. Porque el sol es democráticamente igualito para todos. Y si achicharra, nos achicharra a todos.
Y esta vez tengo que decir que hago eco de una buena noticia, porque luego de un silencioso y permanente esfuerzo realmente mundial, en el cual las industrias tuvieron que adecuarse, no les quedó otra, el agujero de ozono empieza a cerrase lentamente pero con certeza.
Científicos argentinos midieron los valores más altos de este gas de los últimos 25 años en la base Marambio de la Antártida.
Y estiman que para el año 2050 debería estar en los valores previos al uso del Cloro Flúor Carbono, de los principales gases que generaron el problema.
Un día que podemos abrir con una buena!