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Editorial del Programa ECOS del día 25 de Noviembre de 2017

 

¿Vamos ganando los buenos en este mundo?

 

 

Hoy voy a empezar con algunas interesantes, (digo, porque siempre comienzo el programa, en general, con cuestiones problemáticas).
La Agencia Internacional de Energía pronostica que las energías renovables van a crecer un 12% más de lo previsto, gracias al espectacular crecimiento que estas tecnologías están teniendo. Y agrega que este boom de las renovables está poniendo en aprietos al gas natural y al carbón.
En 2016, la capacidad añadida en renovables -hidroeléctrica, solar, eólica, bioenergía, olas y mareas- tuvo un récord mundial, al crecer en 165 GW, (que es un montón) y que es un 6% más que en 2015. La que más aumentó fue la solar fotovoltaica: un 50%, para llegar a más de 74 GW, lo que hace que creciera más que cualquier otro combustible y que superare el crecimiento neto del carbón.
Del otro lado de los Andes, la empresa chilena Colbún se adjudicó la Licitación Internacional Eólica de Taltal, para construir el que será el mayor parque eólico de la región, con 607 MW previstos de capacidad instalada, en casi 8 mil hectáreas de terrenos fiscales, en la región de Antofagasta, con una energía eléctrica producida equivalente al consumo de 730.000 hogares. todo Mar del Plata! Además… actualmente existe en Chile 1.429 MW de capacidad instalada en eólica.
Y por este lado de los Andes, 117 empresas compraron pliegos para la nueva licitación del Ministerio de Energía, que aspira adjudicar proyectos por hasta 1.200 megavatios de potencia en energía eólica, solar y biomasa en el marco de la Ronda 2 del "Plan RenovAR". Y es un récord, también contra los 74 pliegos que se habían entregado en la primera ronda.
Para alguien como yo que vengo desde hace tantos años viendo pasar las cosas en estos temas, es como que estamos en un punto de inflexión en varios aspectos, que eran impensables allá por los 80 y por 90.
Una, esta manera increíblemente rápida de apostar por las renovables, y con auspicios de generar tanta que no será necesario seguir dándole vueltas al caramelo de la nuclear. Empresas que se tiran de cabeza a proponer emprendimientos. Grandes y pequeñas empresas, nacionales o mixtas, con cláusulas de compre nacional para equipamientos. Es algo interesantísimo.
Otra cosa que desbordó, y que también era impensable hace 20 años, es la agroecología como puerta de salida a este “toxic world” que nos impusieron las industrias químicas. Montones de predios, fincas, chacras, grandes medianas y pequeñas que explotan con producción sana, sobre un suelo sano, produciendo alimentos que no enferman y sin pelearse con los vecinos por las fumigaciones. De veras el mapeo nos deja sorprendidos. Son muchos.
Y cada vez es más la gente que busca productos sanos. Los precios van bajando lentamente…
Por supuesto que hay montones de cosas que siguen mal y peor, como el coqueteo que se está pretendiendo hacer en la ciudad de Buenos Aires para volver a incinerar la basura, o el empecinamiento de permitir la megaminería hidrotóxica, o las nucleares, o las mega represas. Ya sé que hay mucho aún.
Pero sobre todo este cambio –la parte en positivo- sobrevuela el darse cuenta de que el mundo era finito, que los bienes comunes se acaban o se arruinan, que nos metieron de cabeza en un perverso ciclo de consumo voraz, y que trataron de separar la ética de nuestras vidas. Porque es una cuestión ética, saben? Nuestras acciones diarias nos tienen que interpelar todo el tiempo. Porque la mirada que damos sobre la vida y sobre la naturaleza es al fin, una cuestión ética.