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Editorial del Programa ECOS del día 9 de Febrero de 2013

 

La obsolescencia programada. Ciencia ficción ya!

 

 

Hoy quería abrir con una reflexión en línea con la nota “La guerra por la tecnología que dura toda la vida” publicada por Anahí Aradas en BBC Mundo
En la cual dice que “la empresa Philips lanzó al mercado estadounidense una bombilla capaz de durar 20 años si se utiliza un par de horas al día. Éste es un dato insólito en un mundo donde la tecnología se diseña para que muera pronto. ¿Notaron que los autos, neveras y demás artilugios de los 50-60 duran mucho más que nuestros aparatos último modelo?” se pregunta la colega.
“Hubo un tiempo, señala, en que incluso las medias de nylon sobrevivían a todo tipo de adversidades conservando su estado original. Sin embargo, se cree que a raíz de la crisis económica de 1929, lo que se conoce como obsolescencia programada, se estableció para garantizar un constante crecimiento de la economía, la dinamización del flujo de capital, crédito y consumo que hoy constituyen los engranajes que mueven nuestro sistema. Y esta política se habría estrenado precisamente con un objeto: la bombilla.
"Ahora mismo la obsolescencia programada es un instrumento de las grandes multinacionales para explotar sus productos.
Benito Muros, empresario español, comercializa una lamparita que promete funcionar durante 100 años sin problemas, con un 70% menos de emisiones y un 92% menos de consumo energético. Su diseño se basó en la que desde hace 111 años ilumina un parque de bomberos de California, en Estados Unidos, y que se puede ver en el documental imperdible “Comprar, tirar, comprar”
Muros dice haber recibido amenazas, llamadas anónimas en las que ofrecían dinero por no sacar el producto al mercado, luego la oferta se transformó en amenazas, que están bajo investigación policial.
“El escritor Aldous Huxley, dijo en su novela "La Isla" que el "armamento, la deuda universal y la obsolescencia programada son los tres pilares de la prosperidad occidental. Si la guerra, la basura y el préstamo de dinero se terminaran, colapsaríamos".
“La economía capitalista vive del crédito, el consumo y la obsolescencia programada. Sin ella, dicen los economistas que la defienden, la gente compraría menos, no se podría mantener el actual nivel de producción y puestos de empleo. Un menor margen de beneficios frenaría la innovación, disminuiría el grado de competencia y daría lugar a monopolios.
Todo esto generaría un efecto en cadena en todos los eslabones de la sociedad de consumo, por lo que un mundo sin obsolescencia programada sería inviable. Sin embargo, también resulta inviable producir a este ritmo en un planeta de recursos finitos. Lo peor es que a pesar de que se acaban los recursos, el ciclo de comprar, usar y tirar es cada vez más acelerado.”
Pero con este lanzamiento de la lamparita que dura 20 años, yo quería recordar al otro gran autor de la distopía: Georges Orwell, en su 1984.
Allí, el protagonista está encargado de destruir toda evidencia en periódicos (los libros están prohibidos) que diga que las cosas antes fueron diferentes.
El ejemplo: comen 15 gramos de chocolate por dia, cada habitante.
Hay que hacer que coman menos. Pero no hay que decir que les darán un recorte, sino un aumento en la ración.
Entonces, para bajarles de 15 a 10 sin que se den cuenta, se hace una fortísima campaña de prensa en la cual se celebra que la ración sube de 5 a 10. Y se destruye toda evidencia que indique que antes recibían una racion de 15. Y la gente sale a celebrar ese “aumento”.
Aquí, Philips sale a celebrar la lamparita que, usada solo 2 horas diarias, podría durar 20 años.
De chiquita, cuando se quemaba una lamparita era un acontecimiento!
Volvé, Orwell. O mejor no, que vas a darte cuenta que se han hecho realidad tus peores pesadillas distópicas.